Pedro Sánchez a Abascal: “Salvini, Le Pen, Putin y usted no se saldrán con la suya; son la muerte de Europa”
Pedro Sánchez ha acusado a Santiago Abascal, líder de Vox, de estar haciendo el juego a Vladímir Putin, y ha asegurado este miércoles que si en Europa se diera la coincidencia de que Abascal gobernase en España, Salvini en Italia y Le Pen en Francia esa conjunción ultraderechista sería “la muerte de Europa”.
El presidente del Gobierno, durante una sesión de control en el Congreso tomada por la guerra de Ucrania, ha sentenciado que Putin ansía para la UE “gobiernos autoritarios”, pero también partidos de oposición que auspicien manifestaciones “no contra la guerra en Ucrania, sino contra los gobiernos que se oponen a ella”. “Pero esto no va a ocurrir, ni España ni Europa lo vana consentir: Salvini, Le Pen y Putin no se saldrán con la suya”, ha concluido ante un Abascal que minutos antes había calificado la invasión de Ucrania como “la guerra ilegal e ilegítima de Putin”.
El duelo de la mañana parecía que iba a ser el de Sánchez con Cuca Gamarra, portavoz parlamentaria del PP post-Pablo Casado. Pero no lo fue.
El presidente llegó a ser incluso displicente con la popular, a quien le reprochó: “No sé a quién estoy contestando, si al viejo o al nuevo PP, porque usan los mismos argumentos del viejo PP y usted me recuerda al antiguo portavoz del viejo PP”. Y no hubo más preguntas del PP, que había reclamado al presidente que diera ejemplo de ahorro a los españoles para afrontar la escalada de precios debido a la guerra de Putin, pero que venía de antes con el despegue de los precios de la energía.
Pero llegó el momento de Abascal, que en su intervención hizo un repaso de su propio programa electoral y le pidió que “baje a la calle”.
El líder de Vox reclamó para España independencia alimentaria y energética, y reclamó un cambio de rumbo. “Haga algo; elimine temporalmente o rebaje los impuestos sobre los bienes esenciales en lugar de hacer caja; hágalo con la luz y la gasolina y cierre el insultante ministerio de la señora [Irene Montero]”, le dijo. “Haga eso o váyase, porque su gobierno es una fábrica de miseria, al igual que su ideología”, concluyó Abascal.
El presidente del Gobierno atacó con dureza la intervención de Abascal, a quien acusó de representar lo peor de Europa y de ser connivente con el máximo mandatario ruso. “Lo que le gustaría a Putin es que usted está haciendo o intentando hacer; que Europa esté dividida”, por lo que, según Sánchez, al presidente ruso le vienen bien que en España “haya manifestaciones no contra la guerra, sino contra los gobiernos que se oponen a la guerra, como está haciendo usted”, ha subrayado.
Sánchez ha pedido a los españoles que piensen qué sería de Europa si la ultraderecha gobernase. “Sería la muerte de Europa”, se ha contestado; “porque ustedes representan la intolerancia, la falta de diálogo y por eso lo que ha hecho Putin es apoyar a aquellos con los que usted se reunía a primeros de año, [Matteo] Salvini y [Marine] Le Pen. Son ustedes. Putin quiere gobiernos autoritarios en Europa, pero le voy a decir una cosa: eso no va a ocurrir. Ni España ni Europa van a permitir que ustedes y sus movimientos políticos gobiernen en España, en Europa. Europa prevalecerá. Salvini, Le Pen y Putin no se saldrá con la suya”.
Abascal cabeceó en su escaño mientras los socialistas en pie aplaudían con fuerza a su líder. Y con ello, paso a la siguiente pregunta: qué va a hacer el Gobierno para paliar la crisis en Canarias. Ana Oramas aseguraba que o se intervenía para salvar el turismo en las islas “o la gente se nos va a morir de hambre”.